Con la llegada de los Juegos Olímpicos de París 2024, RTVE adaptó su programación para captar cada momento del evento, aprovechando la coincidencia del huso horario con España.
Esto permitió a los espectadores seguir las competiciones de forma continuada, pero también trajo consigo una serie de ajustes en la programación habitual que no pasaron desapercibidos entre los aficionados a las series diarias de la cadena.
Este cambio, aunque fue una oportunidad para disfrutar del espíritu olímpico, resultó en la suspensión temporal de series queridas como ‘La Moderna’ y ‘La promesa’.
En el programa de septiembre de ‘RTVE responde’, Rosa María Molló, Defensora de la Audiencia, abordó las preocupaciones de los espectadores afectados por estos cambios. Se discutieron los desafíos de mantener una programación regular durante eventos de gran envergadura como los Juegos Olímpicos, y cómo esto impactó la emisión de las populares series diarias.
José Pastor, director de Cine y Ficción de RTVE, explicó la situación desde una perspectiva de gestión de contenidos. Subrayó que la decisión de priorizar la cobertura de los Juegos Olímpicos sobre la programación regular se tomó considerando la importancia y la rareza del evento. Además, mencionó que el verano es tradicionalmente un momento de menor audiencia para las series diarias, lo que mitigó en parte el impacto de los cambios.
Pastor también destacó que estos ajustes proporcionaron una pausa necesaria para los equipos de producción, quienes enfrentan una demanda constante de contenido nuevo. Este respiro permitió a RTVE revisar y mejorar sus procesos de producción, buscando optimizar tanto la calidad del contenido emitido como las condiciones laborales de sus equipos.
La producción de series diarias es un proceso intensivo que requiere no solo creatividad constante sino también una logística impecable para mantener el flujo de nuevos episodios. «La pausa durante los Juegos Olímpicos nos ha ofrecido una oportunidad para reevaluar nuestras estrategias de producción y implementar mejoras que beneficiarán tanto a nuestro personal como a nuestra audiencia en el futuro», comentó un coordinador de producción de RTVE, sin entrar en detalles específicos.
Este ajuste en la programación también ha sido una prueba de la flexibilidad y la capacidad de adaptación del equipo de RTVE, demostrando que incluso en tiempos de grandes eventos internacionales, la cadena se esfuerza por mantener un equilibrio entre el entretenimiento deportivo y la ficción televisiva, asegurando que la calidad del contenido no se vea comprometida.