Cruz dio un sorbo de vino tinto, sus ojos agudos seguían a la pareja de su hijo que discutía acaloradamente en la sala. Sus voces resonaban, duras y llenas de reproches. Cruz sonrió satisfecho. Finalmente, el matrimonio que parecía tan sólido de su hijo comenzaba a resquebrajarse.
Alonso, el hijo mayor de Cruz, siempre se mostró como el hombre de la familia. Amaba a su esposa, Jana, una mujer bella e inteligente. Pero desde que Jana mencionó la posibilidad de mudarse a un nuevo barrio exclusivo, comenzaron a tener frecuentes discusiones acaloradas.
Jana siempre había soñado con una vida lujosa, donde pudiera mostrar su estatus y posición. Mientras tanto, Alonso prefería la vida tranquila que llevaban, sin querer hacer muchos cambios. La diferencia en sus perspectivas de vida creó una gran brecha entre ellos.
Cruz pronto se dio cuenta de esto. Sabía que el matrimonio de su hijo estaba al borde del colapso. Y él, con su amplia experiencia en la vida, decidió no intervenir. En lugar de eso, se limitó a observar en silencio y esperar los resultados.
Alonso, a diferencia de su padre, se mostraba preocupado. No quería que su matrimonio fracasara. Hizo todo lo posible por reparar su relación con Jana, pero todos sus esfuerzos resultaron inútiles.
Finalmente, se organizó una fiesta de cumpleaños para celebrar el aniversario de bodas de Alonso y Jana. Pero en lugar de ser una ocasión para reavivar su relación, la fiesta se convirtió en una guerra fría. Jana llevaba un vestido elegante, exhibiendo sus costosos joyeros, mientras que Alonso se sentaba solo en un rincón, bebiendo vino.
Mientras tanto, Cruz estaba sentado en el sofá, observando todo lo que ocurría. Podía ver claramente la distancia entre su hijo y su nuera. Sabía que ese matrimonio estaba llegando a su fin.
Tal como Cruz había predicho, unas semanas después, Alonso y Jana anunciaron oficialmente su divorcio. Cruz fue a consolar a su hijo, pero Alonso simplemente negó con la cabeza y dijo que era algo que ya había anticipado.
Cruz abrazó fuertemente a su hijo, su corazón lleno de emociones. Sabía que este divorcio causaría mucho sufrimiento tanto a Alonso como a Jana. Pero también creía que era la mejor manera de liberar a ambos.