Jana se disculpa con Manuel por haber abandonado la cena y acuerdan que Jana no volverá a cenar con el resto de la familia hasta que se sienta preparada. Alonso accede a acompañar a su mujer a la fiesta de los condes de Urbizu, siempre y cuando ella abandone la guerra contra los duques de los Infantes. La marquesa contrata por sorpresa a una institutriz para Jana.
Martina y Petra se enfrentan abiertamente al conde de Ayala, mientras José Juan pide a Lorenzo dinero para seguir con la boda. Petra le asegura a Santos que pronto descubrirán toda la verdad sobre su madre. El padre Samuel no reconoce haber robado el crucifijo y, ante los reproches de María Fernández, este muestra su cara más agresiva.