Jana siempre se sintió como una parte indispensable de su grupo de amigos cercanos en la empresa. Los cafés matutinos, las charlas divertidas después del trabajo y los viajes de fin de semana, siempre estaban juntos. Pero recientemente, Jana notó un pequeño pero evidente cambio en la manera en que los demás la trataban.
De las bromas informales, sus compañeros de trabajo comenzaron a ser más educados, incluso algo reservados. Aún la llamaban por sus apodos cariñosos de antes, pero el tono era diferente, había una distancia palpable. Al principio, Jana pensó que simplemente estaba siendo demasiado sensible, pero cuando este cambio se hizo más frecuente, comenzó a sentirse preocupada.
Un día, el jefe de Jana, Cruz, la llamó a su oficina y le dio una noticia inesperada: sería trasladada a una nueva sucursal en una zona más exclusiva. Esta era una gran oportunidad de ascenso, pero también significaba que Jana tendría que alejarse de sus amigos más cercanos.
Esta noticia hizo que las diferencias en el trato hacia ella se volvieran aún más evidentes. Jana se dio cuenta de que el respeto y la extraña distancia que sentía era porque todos sabían que ella se iría y se unirá a una clase social diferente.
Al llegar a la nueva zona, Jana se sintió como una extraña. Las personas allí eran amables y educadas, pero también mantenían una distancia con ella. Se interesaban más por su origen y su familia que por sus gustos e intereses.
Jana se sintió perdida entre dos mundos. Extrañaba los días en que podía ser ella misma, expresar sus emociones con libertad entre sus amigos cercanos. Pero también se dio cuenta de que esta oportunidad de ascenso era crucial para su futuro.
En los primeros días en el nuevo trabajo, Jana intentó integrarse, pero no tuvo mucho éxito. Se sentía sola y desconectada. Sin embargo, poco a poco comenzó a encontrar puntos en común con algunos de sus nuevos compañeros. También eran jóvenes, entusiastas y compartían sueños similares.
Jana se dio cuenta de que, sin importar el entorno, siempre podía encontrar nuevos amigos. Lo importante era estar abierta y dispuesta a conectar con los demás.
Tiempo después, Jana organizó una pequeña fiesta en su casa para presentar a sus nuevos amigos a los antiguos. La fiesta fue muy divertida, todos tuvieron la oportunidad de conocerse mejor. Jana se sintió feliz al ver a todos conversando y riendo juntos